Aprende a hacer mejores entrevistas de trabajo para que no pierdas diamantes en bruto para tu empresa que puedan terminar siendo los genios de mañana.
Anteriormente te había hablado sobre cómo contratar talento humano en una empresa y hoy, nos vamos a enfocar en cómo gestionar paso por paso esas entrevistas de trabajo para que no sean una pesadilla.
1. Planifica las entrevistas de trabajo
No puedes hacer entrevistas de trabajo sin planificar cada paso. Primero debes responder: ¿qué necesita mi empresa?, ¿vender más, mejorar la producción, certificar procesos de calidad, un cambio de imagen?
Después, deberías definir los objetivos a corto y largo plazo de la empresa. De esta información, puedes empezar a organizar el tipo de perfil que necesitas en tu empresa con una lista de requisitos:
Estos requisitos pueden ser:
- Alegre o serio.
- Joven o no.
- Lugar de residencia.
- Requisitos tecnológicos (ordenador propio, móvil inteligente, etc.)
- Características personales (buen orador, buena presencia, etc.)
- Habilidades web y manejo de programas.
- Idiomas que debe hablar.
Ahora debes enviar y publicar tu solicitud de candidatos en tu página web, en tu blog, en redes sociales y por supuesto, usar clasificados en Internet y AdWords.
Una vez que empieces a recibir solicitudes, es necesario que empieces el proceso de selección. Yo te recomiendo este orden:
2. Primeros contactos digitales
Para ahorrar más tiempo y aprovechar las herramientas de las que disponemos en Internet, los modernos recursos humanos hacen un seguimiento en redes sociales a sus candidatos. Este acercamiento, un poco tímido al principio, te permite tantear el terreno y corroborar la actitud, los gustos, la experiencia y un poco de su personalidad.
Puedes agregarlo a las redes sociales Twitter, LinkedIn o Google+ o darle ‘Me gusta’ si tiene una página de Facebook y ten un contacto por correo electrónico. Agradécele, intercambia comentarios, trátalo como un consumidor, responde dudas y confirma una reunión próxima.
3. ¡No! El CV no ha pasado de moda
Aunque estemos en la era digital que nos ayuda a clasificar todo en Internet, en las entrevistas de trabajo el CV y las cartas de presentación son unos requisitos ‘casi’ obligatorios. Una vez que tengas varios candidatos a la vista pídeles su CV para conocerlos un poco mejor.
En el CV tienes que ver bien ciertos aspectos que te dan información implícita:
- Lalongitud: un currículo debe tener entre 2 y 3 páginas.
- Laorganización: te dirá si el candidato es o no organizado.
- Legibilidad: ¿se puede leer a simple vista? ¿El tamaño de letra es adecuado? ¿es agradable visualmente?
- Redacción: mira cómo explica sus logros, sus trabajos, qué palabras utiliza.
- Contenido: presta atención a las habilidades, experiencia y formación del candidato y compara cuántas coinciden con tu lista de requisitos.
4. Usa Internet para entrevistar
Las entrevistas de trabajo digitales son la tendencia en los recursos humanos. El outsourcing y la contratación de autónomos bilingües ha creado el ambiente perfecto para que las empresas consigan empleados en cada rincón del planeta.
Además, no importa si tu empresa está en Madrid y tus candidatos también. Iniciar una conversación por video llamada les permite ahorrar dinero y tiempo a ambos, y tú como reclutador puedes crear un filtro para ir asegurando las entrevistas en persona.
Algunas preguntas que puedes hacer son:
- ¿Por qué quieres trabajar en nuestra empresa?
- ¿Qué te gusta de la empresa, qué y cómo la mejorarías?
- ¿Cómo te gusta trabajar?
- ¿Cuál ha sido el mayor reto y cómo lo resolviste?
- ¿Has hecho trabajos relacionados a este?
- ¿Cómo has obtenido tus habilidades, por formación o práctica?
- ¿En qué consideras que eres bueno y en qué no?
- ¿Cómo puede la empresa ayudarte en sus objetivos profesionales?
No te olvides de organizar bien las citas con los candidatos. Recuerda que el tiempo de ellos es valioso también. Si las entrevistas se confunden o si duran más de lo debido, demuestras que tu empresa no es muy profesional (¡o que estás buscando a un experto en recursos humanos!).
“El mejor entrevistador obtiene muchas respuestas con pocas preguntas”
5. Preguntas que no debes hacer en las entrevistas de trabajo
Evita las preguntas confusas o que no aporten nada relevante, como por ejemplo:
- “Hábleme sobre usted”
- “¿Cómo se ve en 5 años?”
- “Deme razones por las cuales debo elegirlo a usted y no a los demás”
- “¿Es soletero(a) o casado(a)?”
- “Si fueses un objeto, ¿qué serías y por qué?” o preguntas parecidas.
- Hora de conocerse en persona
Esta es la parte de las entrevistas de trabajo que más odian los candidatos así que tienes que ingeniártelas para hacerlo sentir cómodo. No puedes darte el lujo de perder a un talento por tu mala gestión de entrevistas.
Recuerda que aunque son ellos quienes están siendo ‘evaluados’, tu empresa también aumentará su reputación cuando vean que tienes una gestión de recursos humanos agradable.
Los tipos de entrevistas
Los tipos de entrevistas de trabajo en persona que puedes usar son:
- Entrevista informal: acuerda la reunión en un café o en algún lugar tranquilo y tengan una conversación.
- Entrevista formal: cita al candidato a tu oficina y hazle una entrevista formal con una sonrisa. Es importante que escuches muy bien a tu candidato y que sonrías un poco.
- Entrevista en grupo: han demostrado que varias personas hablando en un tono muy amigable hace que cada miembro del equipo pregunte sus dudas y evalúen al candidato. Al fin y al cabo, puede ser el próximo compañero.
Para organizar la recepción de solicitudes puedes integrar un formulario automatizado y un plugin que se conecte con el perfil de LinkedIn (algunos de ellos permiten ver el CV LinkedIn del candidato).
No dejes de lado el hecho de que un experto y alguien con más certificados suponen un acuerdo monetario mayor que el de alguien que quiere formarse de cero con tu empresa.
Es cuestión tuya decidir en las entrevistas de trabajo y llegar a un acuerdo con el candidato.
¿Quieres saber más sobre las entrevistas de trabajo? Te recomiendo entonces leer cómo contrato a mi primer trabajador independiente.