La planificación operativa en el área financiera es fundamental para el éxito de cualquier empresa.
Ya que es a través de un correcto plan de acción financiero, que se pueden establecer objetivos y alcanzar las metas a corto plazo.
En este artículo, exploraremos la importancia de la planificación operativa en el área financiera, así como el objetivo principal de este proceso y cómo desarrollarla.
También, puedes conocer los aspectos generales de la planificación operativa en el post titulado, Planificación operativa: cómo puede beneficiar a tu negocio.
Así que, si estás buscando mejorar tus resultados financieros y optimizar los recursos de la empresa, ¡sigue leyendo!
¿Qué es la planificación operativa en el área financiera?
Esta se refiere al proceso de establecer objetivos y desarrollar estrategias específicas para lograrlos.
Está bajo la responsabilidad del gerente financiero, quien asigna los recursos necesarios y coordina las acciones de los miembros del equipo, para alcanzar los objetivos trazados.
Esta planificación estratégica financiera está estrechamente relacionada con la planeación estratégica, pues se basa en los objetivos establecidos en la misma.
Algunos ejemplos de actividades involucradas en este proceso de planificación incluyen:
- La elaboración de presupuestos.
- El monitoreo y control de los gastos.
- La gestión de la tesorería.
- Y, la evaluación de las inversiones.
Beneficios de una buena planificación operativa financiera
Al hacer un plan operativo, la organización puede establecer los objetivos a largo plazo y determinar cómo su trabajo contribuye a cumplir los objetivos estratégicos, establecidos en este tipo de planeación financiera.
Este plan operativo también debe establecer metas y además de objetivos a corto plazo.
Además, al contar con una buena planificación operativa en el área financiera, las empresas pueden tomar decisiones basadas en información precisa y actualizada, lo que les permite optimizar recursos y reducir costos.
Asimismo, una adecuada planeación financiera permite brindar a las empresas una mayor capacidad para la gestión de recursos, a la hora de enfrentar situaciones adversas y crisis, ya que facilita una mejor previsión y preparación.
¿Cómo se realiza la planificación operativa financiera?
La planificación operativa en el área financiera es un proceso esencial para asegurar el éxito de cualquier empresa.
Y, se deben seguir ciertos pasos clave para llevar a cabo una planificación financiera efectiva, desde la fijación de metas y objetivos hasta la elaboración de presupuestos y la revisión constante de los resultados.
Con esta información, podrás comenzar a desarrollar una estrategia financiera sólida para tu negocio.
Pasos para una planificación operativa financiera efectiva
Para realizarla se deben cumplir 5 pasos, fíjate:
De este proceso depende el éxito a largo plazo.
Veamos:
1. Análisis de la situación actual
Es crucial hacer un análisis de la situación financiera del momento, para poder establecer una planificación operativa efectiva.
Así que, en este primer paso, corresponde evaluar cuidadosamente los activos y pasivos de la empresa.
Del mismo modo, es fundamental conocer los recursos con los que se cuenta, el capital de trabajo, así como las deudas y obligaciones financieras que se han adquirido.
De esta manera, se puede determinar cuál es el estado real de la empresa y cómo se encuentra su situación financiera general, advirtiendo problemas que puedan presentarse.
Además, es importante identificar las fortalezas, debilidades, oportunidades y amenazas que enfrenta financieramente.
De modo que, el plan financiero debe permitir el conocer la viabilidad, para tomar decisiones en el área estratégica, y lograr el objetivo de mejorar el rendimiento financiero.
2. Establecimiento de metas y objetivos financieros
Para crear este plan estratégico, es necesario definir objetivos y metas a corto, mediano y largo plazo.
Estos deben tener los elementos que les permita ser clasificados como SMART. Es decir, que deben ser específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con plazo definido para su ejecución.
Por lo tanto, al establecer objetivos SMART, se asegura que las metas sean claras y concretas, facilitando su seguimiento y evaluación.
Además, es fundamental establecer plazos para cada una de las metas, de manera que se tenga un horizonte temporal que permita orientar las acciones y esfuerzos financieros.
La planificación a corto plazo, debe enfocarse en el logro de estos objetivos planteados y de las metas financieras, definiendo estrategias y acciones concretas, para alcanzar el resultado esperado en los plazos establecidos.
En consecuencia, elaborar un plan financiero bien estructurado y basado en metas y objetivos SMART, proporciona una guía clara de medidas o mecanismos a seguir, para el éxito financiero de la organización.
Y, uno de los beneficios más importantes, es que, de este modo, se está evitando el riesgo de insolvencia en el futuro.
3. Elaboración de presupuestos
Este paso implica una serie de gestiones que permiten crear un plan financiero, en el cual se refleje la planificación operativa de todas las áreas de la empresa.
En primer lugar, es necesario determinar los ingresos y gastos proyectados para el periodo en cuestión.
Esto se logra a través de un análisis detallado de las fuentes de financiación e ingresos, como ventas e inversiones, y de los gastos esperados, tales como costos de operación, salarios y pagos de deudas.
Una vez que se ha establecido esta base, lo siguiente en el desarrollo del presupuesto, es la asignación de recursos disponibles, de manera eficiente y realista.
Esto implica priorizar los diferentes rubros de gasto y reasignar o determinar cómo se distribuirán los recursos de la organización en forma equilibrada.
Como se puede observar, la clave para una elaboración exitosa de presupuestos, radica en considerar los diferentes escenarios para aprovechar las oportunidades, y tomar en cuenta la incertidumbre que pueda existir en el entorno empresarial, a corto o largo plazo.
4. Implementación de estrategias y acciones
La implementación de estrategias y acciones se inicia con la planificación operativa, donde se definen las actuaciones necesarias para ejecutar las estrategias financieras establecidas.
Estas estrategias financieras son fundamentales para mantener la salud económica de la organización, y llevarla al logro de los objetivos de la planificación.
Razón por la cual, es importante realizar ajustes periódicamente para adaptarse a los cambios del entorno empresarial, y garantizar la eficacia de las estrategias implementadas.
En cuanto a los ajustes, estos pueden incluir cambios en los presupuestos, en las inversiones o en los niveles de endeudamiento, entre otros caminos de acción.
También, pueden ser necesarios cambios en las políticas a ejecutar por el equipo de marketing.
Por ejemplo, en cuanto a precio, promoción o distribución de los productos y/o servicios ofrecidos.
De tal manera, se puede afirmar que al aplicar las estrategias y acciones se requiere de una planificación de cuidado, la ejecución rigurosa de las mismas, y la capacidad para realizar ajustes según sea necesario.
5. Monitoreo y control
Al respecto, consiste en llevar a cabo un seguimiento constante de los indicadores financieros, para evaluar el desempeño y tomar acciones correctivas en el caso de ser necesario.
Para realizarlo, es importante seguir una serie de gestiones clave, explicadas a continuación:
- En primer lugar, se deben establecer los indicadores financieros que se van a monitorear.
Estos pueden incluir:
- El nivel de ventas.
- Los costos operativos.
- El margen de utilidad, entre otros.
Una vez establecidos los indicadores, lo siguiente es:
- Llevar a cabo el monitoreo constante de los mismos, para detectar cualquier desviación o variación no esperada.
Si se identifica alguna desviación, es necesario llevar a cabo un análisis para determinar las causas, tomar acciones correctivas, acordes con la situación.
Además de identificar responsabilidades y acciones.
Entonces, a través de la implementación del monitoreo y control, que se puede mantener un seguimiento efectivo sobre la gestión financiera de la organización.
De esta forma, se garantiza el cumplimiento de los objetivos propuestos, lo cual permitirá tomar decisiones basadas en datos concretos.
Herramientas a usar
Para la ejecución del plan financiero de manera efectiva, es necesario utilizar diferentes herramientas, que permitan analizar posibles problemas que puedan aparecer y tomar decisiones adecuadas de forma oportuna.
Entre las herramientas más populares se encuentran:
- La proyección de flujo de efectivo.
- El presupuesto.
- Y, el análisis de costos.
De modo que, estas herramientas permiten evaluar los ingresos y gastos de la empresa, identificar posibles problemas financieros y tomar decisiones acertadas para maximizar el rendimiento económico.
Revisando lo que implica cada una de ellas, tenemos en detalle que:
La proyección de flujo de efectivo:
es una herramienta que permite estimar los ingresos y gastos futuros de la empresa, lo cual es clave para tomar decisiones financieras adecuadas.
El presupuesto:
Por su parte, ayuda a planificar y controlar los gastos, así como establecer metas financieras a corto y largo plazo.
Análisis de costos:
También, se utilizan herramientas para el análisis de costos, las cuales que permiten identificar los gastos directos e indirectos de los productos o servicios ofrecidos por la empresa.
Sin duda, esto es esencial para fijar los precios adecuados y maximizar los márgenes de beneficio.
Pero, además, en la actualidad, muchas empresas optan por emplear software de planificación financiera, para simplificar y agilizar este proceso.
Estos programas cuentan con opciones de análisis y reportes automáticos, lo cual facilita la toma de decisiones y permite hacer ajustes en tiempo real.
Al utilizar un software de planificación financiera debe reducirse el error humano, con lo cual se maximiza la precisión de los cálculos.
Retomando lo dicho, es de resaltar que las herramientas para realizar una planificación financiera operativa, facilitan la toma decisiones adecuadas en el ámbito económico.
La proyección de flujo de efectivo, el presupuesto y el análisis de costos son algunas de las herramientas más populares para este tipo de plan.
Y, a estas, se les puede sumar el uso de software de planificación financiera, con beneficios adicionales como la automatización de tareas, y la generación de informes precisos y actualizados.
Conclusiones
Una gestión financiera sólida requiere de una planificación operativa efectiva, para anticiparse a los posibles escenarios y tomar decisiones acertadas.
Para lograrlo, se debe llevar a cabo:
- El análisis de la situación;
- El establecimiento de metas y objetivos financieros;
- La elaboración de presupuestos;
- La implementación de estrategias y acciones;
- Y, el monitoreo y control.
Para tales fines, son herramientas de apoyo, la proyección de flujo de efectivo, el presupuesto y el análisis de costos; además, del uso de software de planificación financiera.
Por ello, se invita a implementar esta estrategia de planificación y gestión en las empresas, ya que, al crear el plan financiero, se pueden asegurar beneficios y resultados positivos a largo plazo.
Gracias por leernos.
¡Hasta la próxima!